15 Octubre 2012.- El
Padre Orlando Calero festejó con la feligresía de la Parroquia San Juan Bosco
sus 90 años de vida llenos de bendición que le ha regalado El Señor, fiesta que
se realizó con una Eucaristía presidida por sus hermanos sacerdotes.
El Padre Mario Fajardo,
agradeció a Dios por la vida del Padre Calero; por haber dado un gran hombre,
un gran salesiano a Nicaragua. Que con su ejemplo y su humildad ha evangelizado
llevando el amor de Cristo por medio de su testimonio.
Por su parte, el Padre
Calero brindó unas palabras a la Iglesia, dándole gracias a Dios por haberle
permitido llegar un año más de vida. “No me rajo, soy y quiero seguir siendo
salesiano; estoy en pie de guerra y dando guerra” expresó.
El arduo trabajo que ha
realizado el Padre Calero a favor de la feligresía de la Parroquia ha sido grande,
que sus frutos aun se están recogiendo. Una hermosa bendición, un roble de sacerdote.
